El Monitor de Opinión Pública (MOP) es un estudio sistemático realizado mensualmente en Bolivia por Ipsos CIESMORI. Sus resultados son contrastados con los datos globales de la empresa de investigación de mercado más amplia del mundo, Ipsos Global; lo cual permite tener una mirada amplia sobre la realidad del país y su relación con la coyuntura mundial.
En esta entrega correspondiente al segundo trimestre del 2023 se presentan datos interesantes en torno a temas importantes:
♦ Mejora ligeramente en el segundo trimestre la percepción de que las cosas van en la dirección correcta en el país. Sin embargo, la percepción mayoritaria, expresada por cuatro de cada cinco entrevistados, es que vamos en la dirección incorrecta. Esta percepción se hace más pronunciada en las ciudades de Santa Cruz y Cochabamba (84 y 82%, respectivamente).
♦ Se hace evidente que la situación económica incide de forma directa en la percepción de mala dirección: más de la mitad de las personas entrevistadas (54%) sostiene que el estado actual de la economía en el país es muy débil. De igual forma, cuando pasamos a preguntar acerca de la situación económica personal, la proporción aumenta hasta un 61%. Por otro lado, es interesante notar que en la ciudad de El Alto la proporción de personas que califica el estado actual de la economía como fuerte es la más alta de las ciudades evaluadas. En consecuencia, se observa en la ciudad alteña la proporción más alta de personas que opinan que las cosas van en la dirección correcta (31%).
♦ Se incluye en esta medición el Índice de Cohesión Social – ICS que elabora nuestra empresa para establecer las actitudes de los ciudadanos en relación a su conexión con el sistema político (identidad nacional y equidad en el trato), el bien común y las relaciones de confianza con las demás personas. En esta primera medición Bolivia alcanza en este segundo trimestre un ICS de 28.2, con un destacable resultado en la dimensión de las relaciones sociales. El componente más crítico en nuestro caso es el que involucra el grado de corrupción percibido en nuestra sociedad.
♦ Al registrar la opinión que tienen las personas con relación a una serie de actores sociales, preponderantes en este momento en el marco social y político que vive el país, encontramos dos grupos claramente identificados: por un lado, aquellos que registran una opinión positiva, debido a que -entendemos- podrían estar mostrando un buen desempeño o simplemente generando confianza en la población. Entre ellos destacan dentro del grupo económico las empresas privadas (66% confirman tener una opinión positiva) y los bancos (53%). Se suman a este grupo los maestros (60%), la iglesia (53%), las ONG´s (51%) y los medios de comunicación (50%). Por otro lado, los actores sociales que se alzan con una percepción mayormente negativa serían los sindicatos (61%) y las empresas públicas (58%).
♦ Al indagar acerca de qué tan buen trabajo viene realizando diferentes actores apoyando a las personas a mejorar su situación económica familiar, el gobierno resulta el peor evaluado, con 77% de entrevistados en nuestro país que estiman que realizan un trabajo malo o muy malo. Esta cifra es superior al promedio registrado en una encuesta que Ipsos lleva a cabo en 15 países, en donde el apoyo que brinda el gobierno es considerado malo o muy malo por el 59% de las personas consultadas. En el otro extremo de la evaluación, los empleadores son calificados negativamente solamente por el 37% de los entrevistados.
♦ En la misma encuesta internacional encontramos que el 38% de las personas indican que estarían comiendo menos en restaurantes y más en sus casas, como consecuencia de la necesidad de administrar mejor los gastos personales. En Bolivia esta proporción es significativamente superior (55%). Del mismo modo, mientras que en el promedio de la encuesta en 15 países solamente uno de cada cuatro (27%) nos dice que ha limitado sus actividades sociales y de esparcimiento, en Bolivia la proporción alcanza prácticamente a la mitad de los entrevistados (47%).