Según Naciones Unidas, América Latina es la región más emprendedora del planeta: un 33% de las mujeres y un 37% de los hombres tiene la intención de emprender. Asimismo, es importante mencionar que 21% de las mujeres y un 25% de ellos ya crearon una nueva empresa; y todo esto podría deberse a que emprender es considerada la principal opción que eligen muchas personas para su salir de la pobreza.
Ante esta realidad es vital conocer la realidad de aquellos que deciden emprender y las dificultades que deben afrontar en todo su camino, pero sobre todo al momento de hablar de fuentes de financiamiento para hacer realidad sus sueños, que pueden ser variados y de muy difícil acceso para buena parte de la población.
En Bolivia, los créditos bancarios (66%) se han consolidado como la principal fuente de financiamiento para los emprendimientos, más en aquellos que se originan en las ciudades de Santa Cruz (71%) y El Alto (68%), cuyos habitantes se han posicionado como los más propensos a optar por este tipo de préstamos para impulsar sus microempresas, según el Tracker de Marketing de Ipsos CIESMORI. Esta tendencia revela una creciente confianza en el sistema financiero y una búsqueda activa de herramientas para hacer crecer sus negocios.
Si bien los créditos bancarios son una opción popular, los ahorros personales (15%) y los préstamos familiares (9%) continúan siendo las segunda y tercera fuentes de financiamiento más utilizadas por los emprendedores. Estas alternativas, aunque más limitadas en términos de monto, ofrecen mayor flexibilidad y menor burocracia.
El rol de las mujeres en el emprendimiento
Un aspecto relevante de este estudio es el rol de las mujeres como microempresarias. Los datos revelan que son ellas (70%) las que con mayor frecuencia recurren a los créditos bancarios para iniciar sus proyectos. Este hecho resalta el empoderamiento económico de las mujeres y su creciente participación en el sector productivo.
Sin embargo, a menudo enfrentan barreras adicionales como el acceso limitado al financiamiento, las redes de contactos y la capacitación empresarial. Sobre el punto, es necesario mencionar que ONU Mujeres destaca que la brecha de género en la titularidad de cuentas bancarias se redujo en 2021 después de años de estancamiento, aunque los porcentajes varían según las economías. En los países en desarrollo, la brecha de género se sitúa en el 6%, mientras que la cifra a escala mundial es del 4%, con un 78% de hombres que aseguran tener una cuenta en una institución financiera oficial frente al 74% de las mujeres.
La necesidad de un ecosistema emprendedor más sólido
Los resultados del estudio llevado a cabo por Ipsos CIESMORI ponen de manifiesto la necesidad de fortalecer el ecosistema emprendedor en el país. Para ello, es fundamental que el Estado implemente políticas públicas que faciliten el acceso al financiamiento, lo cual no está sucediendo a pesar del entusiasmo de los emprendedores, que enfrentan una serie de desafíos que obstaculizan su crecimiento. Entre las principales dificultades señaladas por los encuestados destaca el poco apoyo o incentivo del estado (57%), seguida de una economía nacional poco favorable para los emprendimientos privados (38%) y la falta de demanda o mucha competencia (35%).
En conclusión, los emprendedores cruceños y alteños demuestran una gran determinación y espíritu emprendedor. Sin embargo, para que sus negocios puedan crecer y generar empleo, es necesario que se aborden los desafíos que enfrentan, especialmente en lo que respecta al acceso al financiamiento bancario y el apoyo del Estado.