Con los confinamientos, el trabajo a distancia y la educación en línea, los bolivianos empezaron a pasar más tiempo en casa y en cierta medida también empezaron a disfrutar de nuevos medios de entretenimiento como el streaming.
En el caso de nuestro país, 31% de los bolivianos que viven en las ciudades capitales del eje cuentan con este servicio; esto según el Estudio MDS realizado por CIESMORI durante cuatro meses del 2021.
¿Cuestión de edad y género?
La capacidad de decisión de adquisición del servicio puede ser variado. En este caso, CIESMORI hace hincapié en la adopción del streaming por parte de las mujeres, pues el 35% de ellas cuenta con él.
El 38% de los bolivianos entre 26 y 40 años destinaron su atención hacia este tipo de consumo de contenido; mientras que el porcentaje (12%) disminuye en la población que va de los 56 años a más. Estos datos nos muestran que el don de la ubicuidad de las nuevas tecnologías no alcanza aún de la misma forma a todos los grupos etarios.
De usos e intereses
Si bien el factor edad y género son determinantes a la hora de optar por algún producto o servicio, también están los intereses de la persona.
En todo caso, aquellos que tienen como principal interés al deporte, tienen una menor inclinación (19%) hacia la adquisición del servicio; mientras que aquellos que sienten atracción por la tecnología y el futuro, optan en un mayor porcentaje (36%) por el streaming.
Las favoritas
Cada plataforma de streaming experimentó un crecimiento diferente; al grado de que algunas se consolidaron como las favoritas de los usuarios. En el caso de los que participaron del estudio de CIESMORI, el 72% afirmó que tienen el servicio a través de Netflix.
Asimismo, cabe destacar que tanto Disney+ (11%) como Amazon Prime (11%), no pasan desapercibidas y son las segundas favoritas en lo que refiere a este tipo de plataformas.
El streaming presume un gran cambio en la forma en la que se accede a los contenidos multimedia: ahora es posible consumir las noticias, música, programas de TV y películas que se desee, cuando y donde se quiera. Por tanto, simplemente se puede decir que la tecnología del streaming marca un antes y un después en la forma de distribuir y consumir contenido.