Bienvenidos a la sexta edición del Monitor Ipsos del Costo de Vida, una encuesta realizada en 32 países en la que se analiza cómo se sienten los ciudadanos de todo el mundo con respecto a sus finanzas durante la policrisis.
En todo el mundo, las tasas de inflación de muchos países empiezan a bajar y la gente empieza a notarlo. Pero la sensación de bienestar aún está lejos. Según nuestros estudios en tracking, la mayoría de los consumidores siguen “sintiendo” el aumento de los precios. Incluso en las partes más optimistas del mundo, apenas una cuarta parte nos dice que “vive cómodamente”
Y si bien empezamos 2024 con las personas menos preocupadas de lo que estaban por la subida de las tasas de interés, las previsiones de recortes de las tasas se están retrasando y los banqueros centrales no descartan nuevas subidas de las tasas.
Al mismo tiempo, en muchos países, la proporción de personas a las que “les resulta difícil” gestionar sus finanzas sigue siendo tan alta como siempre. Mucha gente no cree que vaya a tener más dinero para gastar a corto plazo. Por cada persona que afirma que su renta disponible aumentará durante el próximo año, encontramos otra que espera que disminuya.
A medida que nos acercamos a la mitad de lo que se ha denominado el mayor año electoral de la historia, la preocupación por el coste de la vida, y la forma en que los gobiernos lo gestionan, son a menudo asuntos definitorios en la mente de los votantes. El reto para los políticos, incluso cuando las economías mejoran, es traducir esto en un reconocimiento público del progreso.
Pese a que las elecciones generales en Bolivia están previstas recién para la gestión 2025, el ambiente electoral empieza a ganar terreno con anuncios de candidaturas y formación de nuevas alianzas políticas; que tienen como principal desafío plantear soluciones a la delicada situación económica actual.
Hallazgos clave
♦ El 26% tiene dificultades. Aunque a nivel global sólo un cuarto de la población enfrenta retos económicos, en los países de LATAM esta proporción es mayor, especialmente, Argentina (57%), donde sobrepasa la mitad de encuestados; mientras que en Bolivia (48%) se acerca a la mitad de los entrevistados.
♦ El 39% dice vivir cómodamente/estar bien. Sólo en México (31%) y Brasil (30%) este porcentaje es igual o mayor a 30%. Mientras que en Bolivia (14%) y Argentina (13%) es inferior al 15%.
♦ Los habitantes de La Paz (20%) reportan mejores condiciones de vida. El 21% cree que la inflación de su país nunca volverá a la normalidad. Bolivia es el país de LATAM con más población que cree que la inflación está volviendo a la normalidad (19%), aunque este porcentaje es similar a quienes creen que es una situación sin retorno (17%).
♦ La percepción de inflación creciente en el mundo baja, pero en Bolivia sube. Pese a que globalmente menos gente cree que la inflación seguirá subiendo el año que viene (58%), los bolivianos, en una tendencia creciente, prevén que el aumento de costos se agudizará más adelante (82%).
♦ 29% piensa que tendrá menos dinero para gastar en el próximo año. En Bolivia, esta proporción llega a 43%; este indicador subió 10 puntos desde noviembre del año pasado (33%), y esta sensación está presente en 6 de cada 10 entrevistados Baby Boomers (60%).
♦ Dos tercios esperan que los alimentos suban de precio. Tanto a nivel Global como en Bolivia, 67% prevé incrementos en los costos de los alimentos durante el siguiente año. Aunque este porcentaje redujo 9% en Bolivia en relación a noviembre del año pasado (76%).